Existen dos versiones que intentan explicar el episodio en el que resultó baleada Amelia Molina en La Costanera. La familia acusa a un policía de ser el autor del disparo y el efectivo señala que un ladrón fue el que gatilló. Lo cierto es que la mujer se encuentra en el Centro de Salud, internada y en grave estado de salud.
“Mi abuela estaba barriendo la vereda a la siete de la mañana. A dos casas había una fiesta y de ahí salieron dos hombres peleando. Comenzaron a hacer tiros y ella quedó en el medio. Le pegaron en el estómago”, relató Sandra Peralta en diálogo con LA GACETA.
Según explicó la nieta de la víctima del balazo, en el Centro de Salud la operaron de inmediato: “El disparo le afectó los intestinos y el hígado. No le pudieron sacar la bala porque está tocando una costilla o una parte de la columna. Los médicos la tienen internada en terapia intensiva y la están monitoreado para saber cómo sigue”. Según explicó la familia, si los médicos logran estabilizar a la mujer, deberán operarla para intentar extraer el proyectil.
“La denuncia se hizo temprano pero los peritos recién fueron por la tarde”, se quejó Peralta.
La versión del Policía
Según pudo saber este medio, pese a haber sido denunciado, el policía no se presentó todavía para quedar a disposición de la Justicia. Trascendió que ayer estuvo reunido con sus abogados y que se entregaría en las próximas horas. Con todo, durante la mañana estuvo conversando con algunos compañeros y contó otra versión.
Al parecer, les comentó que él tiene un negocio en la zona y que, cerca de las cinco, quisieron asaltarlo. Siempre según su versión, el policía comenzó a pelear a trompadas contra uno de los ladrones. Al ver esta situación, el cómplice del malviviente disparó el tiro que terminó impactando en Molina.